¿Que se entiende por Países menos desarrollados?

Los países menos desarrollados se distinguen en la terminología utilizada en las Naciones Unidas y los estudios geográficos y económicos de los países en vías de desarrollo y los países desarrollados. Otros términos, especialmente el de países emergentes, se utilizan con distintos contenidos. Los términos países subdesarrollados y tercer mundo, muy utilizados en la segunda mitad del siglo XX, suelen ser considerados por los expertos como desfasados, irrelevantes o poco ajustados a la realidad de la situación internacional a comienzos del siglo XXI. En cambio, el término países pobres sigue utilizándose con profusión, así como el término pobreza. Aunque en algunas circunstancias se ha utilizado el término cuarto mundo para los países menos desarrollados, este término se acuñó y suele reservarse a los estratos sociales más pobres dentro de los países más ricos. Una denominación que tiene cierto uso es la de "países económicamente menos desarrollados" ("less economically developed country" en inglés, con las siglas LEDC). Conviene evitar la confusión con otras expresiones inglesas de contenido semejante y sutiles diferencias: "less developed country" y "landlocked developing country" (siglas LDC y LLDC). El primero de estos términos únicamente se diferencia por el uso las palabras less o least ("menos" o "menor" -la utilización del término países de menor desarrollo es también usual en castellano), mientras que el segundo se refiere a los que no tienen salida al mar, circunstancia que contribuye a la dificultad en su desarrollo (cuestión no tan decisiva para otros casos, como los de Suiza o Austria). Se utiliza también la sigla PMA (del francés pays les moins avancés -"países menos avanzados"-).

Diferentes situaciones dentro de los países menos desarrollados:

La mayor parte de los países menos desarrollados, especialmente los del África Subsahariana, que son la mayoría, se caracterizan por una gran extensión del SIDA y otras enfermedades, así como desnutrición e incluso en algunos casos episodios de hambrunas y verdaderas crisis humanitarias. Sufren condiciones de extrema pobreza, están inmersos en conflictos como guerras civiles o choques étnicos, mantienen estados fallidos o sufren de extensa corrupción política (que llega hasta la cleptocracia) y carecen de estabilidad social. Su forma de gobierno, aunque nominalmente sea democrática, suele corresponderse con distintas formas de autoritarismo o dictadura; e incluso se llega a la división del territorio entre señores de la guerra. Sin embargo, estas características no aparecen en un grupo específico, los de Oceanía: Kiribati, Samoa, Tuvalu y Vanuatu son naciones políticamente estables, con sistemas democráticos, y no tienen problemas étnicos ni guerras civiles. Sus problemas sanitarios o alimentarios no son tan graves. Su clasificación entre los más pobres se debe a la pequeña escala de sus economías, su dependencia de monocultivos, y la pervivencia de la economía de subsistencia (que al mismo tiempo garantiza medios de vida que alejan a la población de la extrema pobreza). Únicamente las Islas Salomón se ven afectadas por inestabilidad política y tensión étnica. En 2006 las Naciones Unidas recomendaron revisar la clasificación de Samoa, que pasaría a ser considerado un país en vías de desarrollo, pero el gobierno samoano protestó, solicitando una revisión de la recomendación. Samoa todavía se mantiene en la lista de los menos desarrollados, pendiente de una decisión que se habría de tomar en 2009.

Países menos desarrollados (PMD) es un término convencional1 para la clasificación de los países según su nivel de desarrollo económico, proveniente del inglés Least Developed Country (LDC). Según la definición utilizada en las Naciones Unidas, que creó el término en 1971, son los que muestran los indicadores socioeconómicos más bajos, especialmente en el Índice de Desarrollo Humano (IDH); y reúnen los tres criterios siguientes:
*Baja renta per cápita: tres años de media inferior a 905 dólares USA, requiriéndose superar los 1,086 para superar la condición de menos desarrollado.
*Debilidad en recursos humanos: comprobada con los indicadores de nutrición, salud, educación y alfabetización de adultos.
Vulnerabilidad económica: producida por la inestabilidad de la producción agraria, de las exportaciones de bienes y servicios, la concentración en la exportación de ciertas mercancías -monocultivos-, la escasa importancia económica de las actividades no tradicionales -economía de subsistencia-, las dificultades consiguientes a las pequeña escala del mercado nacional y las empresas o la repetición de desastres naturales, guerras o conflictos internos que causen desplazamientos masivos de la población. Durante la última revisión de Estados Unidos (2003), se definió el término como los países que cumplían los tres criterios, uno de los cuales era una estimación persistente (tres años de media) de PNB per cápita menor de 750 dólares. Se excluían los países con poblaciones superiores a 75 millones de habitantes.
El Alto Representante de las Naciones Unidas para los Países Menos Desarrollados (The United Nations Office of the High Representative for the Least Developed Countries, Landlocked Developing Countries and Small Island Developing States) coordina la política de las Naciones Unidas para estos países, y proporciona servicios para ellos. La clasificación actual (2015) se aplica a 48 países. En 2007, Las Naciones Unidas sacaron a Cabo Verde de la lista, siendo la segunda vez que se ha producido un hecho semejante.5 La primera vez se hizo con Botsuana en 1994.

¿Que se entiende por un País Desarrollado?

Un país desarrollado, en general, es un país que posee tanto un alto nivel de vida (un alto desarrollo humano) como un gran desarrollo industrial y comercial. Uno de los indicadores más usados para considerar a un país como «desarrollado» es el índice de desarrollo humano. Dicho índice toma en cuenta la riqueza, la educación y la sanidad, otro indicador el cual predomina frente a la definición de países desarrollados es lo que el Fondo Monetario Internacional establece, como márgenes per cápita de países desarrollados, que van desde los 20.000US$ per cápita (nominal), y en el caso del per cápita PPA va desde 22.000US$ (Paridad Poder Adquisitivo) en adelante, con lo cual se denominaría como países con economías avanzadas según el FMI, y países de Ingresos altos según el Banco Mundial, y evidenciaría una economía desarrollada para cada país en particular generando como consecuencia un alto nivel de vida. 

No existe un consenso absoluto sobre todos los criterios usados para calificar el desarrollo. El criterio más fiable y aceptado es aquel extraído de los indicadores sociales sobre la calidad de vida. Aunque no existe total consenso sobre un indicador específico, se suele considerar que un país que tiene un IDH muy alto según la ONU, que tiene el estatus de economía avanzada sobre la base de los estatutos del FMI y además posee ingresos altos según el Banco Mundial, es efectivamente un país desarrollado.


Se considera que un desarrollo económico genera una alta calidad de vida. Si bien los países más industrializados, que han logrado una avanzada tecnología e innovación, alcanzan un elevado desarrollo humano como consecuencia, también hay muchos países que, por cuestiones diversas, han logrado un alto desarrollo humano, pero con medianos o bajos niveles tecnológicos e industriales, en la teoría un país altamente poblado necesariamente necesita generar una alta industrialización para generar consiguientemente una alta calidad de vida, mientras que uno pequeño solo necesita generar una baja industrialización.

¿Que es la Música?

La música (del griego: μουσική [τέχνη] - mousikē [téchnē], "el arte de las musas") es, según la definición tradicional del término, el arte de organizar sensible y lógicamente una combinación coherente de sonidos y silencios utilizando los principios fundamentales de la melodía, la armonía y el ritmo, mediante la intervención de complejos procesos psico-anímicos. El concepto de música ha ido evolucionando desde su origen en la Antigua Grecia, en que se reunía sin distinción a la poesía, la música y la danza como arte unitario. Desde hace varias décadas se ha vuelto más compleja la definición de qué es y qué no es la música, ya que destacados compositores, en el marco de diversas experiencias artísticas fronterizas, han realizado obras que, si bien podrían considerarse musicales, expanden los límites de la definición de este arte.

La música, como toda manifestación artística, es un producto cultural. El fin de este arte es suscitar una experiencia estética en el oyente, y expresar sentimientos, emociones, circunstancias, pensamientos o ideas. La música es un estímulo que afecta el campo perceptivo del individuo; así, el flujo sonoro puede cumplir con variadas funciones (entretenimiento, comunicación, ambientación, diversión, etc.).
Las definiciones parten desde el seno de las culturas, y así, el sentido de las expresiones musicales se ve afectado por cuestiones psicológicas, sociales, culturales e históricas. De esta forma, surgen múltiples y diversas definiciones que pueden ser válidas en el momento de expresar qué se entienden por música. Ninguna, sin embargo, puede ser considerada como perfecta o absoluta.
Una definición bastante amplia determina que música es sonoridad organizada (según una formulación perceptible, coherente y significativa). Esta definición parte de que —en aquello a lo que consensualmente se puede denominar "música"— se pueden percibir ciertos patrones del "flujo sonoro" en función de cómo las propiedades del sonido son aprendidas y procesadas por los humanos (hay incluso quienes consideran que también por los animales).
Hoy en día es frecuente trabajar con un concepto de música basado en tres atributos esenciales: que utiliza sonidos, que es un producto humano (y en este sentido, artificial) y que predomina la función estética. Si tomáramos en cuenta solo los dos primeros elementos de la definición, nada diferenciaría a la música del lenguaje. En cuanto a la función "estética", se trata de un punto bastante discutible; así, por ejemplo, un "jingle" publicitario no deja de ser música por cumplir una función no estética (tratar de vender una mercancía). Por otra parte, hablar de una función "estética" presupone una idea de la música (y del arte en general) que funciona en forma autónoma, ajena al funcionamiento de la sociedad, tal como la vemos en la teoría del arte del filósofo Immanuel Kant.
Jean-Jacques Rousseau, autor de las voces musicales en L'Encyclopédie de Diderot, después recogidas en su Dictionnaire de la Musique, la definió como el «arte de combinar los sonidos de una manera agradable al oído». Según el compositor Claude Debussy, la música es «un total de fuerzas dispersas expresadas en un proceso sonoro que incluye: el instrumento, el instrumentista, el creador y su obra, un medio propagador y un sistema receptor».

Elementos de la música

La organización coherente de los sonidos y los silencios (según una forma de percepción) nos da los parámetros fundamentales de la música, que son la melodía, la armonía y el ritmo. La manera en la que se definen y aplican estos principios, varían de una cultura a otra (también hay variaciones temporales). La melodía es un conjunto de sonidos —concebidos dentro de un ámbito sonoro particular— que suenan sucesivamente uno después de otro (concepción horizontal), y que se percibe con identidad y sentido propio. También los silencios forman parte de la estructura de la melodía, poniendo pausas al "discurso melódico". El resultado es como una frase bien construida semántica y gramaticalmente. Es discutible —en este sentido— si una secuencia dodecafónica podría ser considerada una melodía o no. Cuando hay dos o más melodías simultáneas se denominan contrapunto. La armonía, bajo una concepción vertical de la sonoridad, y cuya unidad básica es el acorde o tríada, regula la concordancia entre sonidos que suenan simultáneamente y su enlace con sonidos vecinos. La métrica, se refiere a la pauta de repetición a intervalos regulares, y en ciertas ocasiones irregulares, de sonidos fuertes o débiles y silencios en una composición.
El ritmo, es el resultado final de los elementos anteriores, a veces con variaciones muy notorias, pero en una muy general apreciación se trata de la capacidad de generar contraste en la música, esto es provocado por las diferentes dinámicas, timbres, texturas y sonidos. En la práctica se refiere a la acentuación del sonido y la distancia temporal que hay entre el comienzo y el fin del mismo o, dicho de otra manera, su duración.

La definición más habitual en los manuales de música se parece bastante a esta: «la música es el arte del bien combinar los sonidos en el tiempo». Esta definición no se detiene a explicar lo que es el arte, y presupone que hay combinaciones "bien hechas" y otras que no lo son, lo que es por lo menos discutible. Algunos eruditos han definido y estudiado a la música como un conjunto de tonos ordenados de manera horizontal (melodía) y vertical (armonía). Este orden o estructura que debe tener un grupo de sonidos para ser llamados música está, por ejemplo, presente en las aseveraciones del filósofo Alemán Goethe cuando la comparaba con la arquitectura, definiendo metafóricamente a la arquitectura como "música congelada". La mayoría de los estudiosos coincide en el aspecto de la estructura, es decir, en el hecho de que la música implica una organización; pero algunos teóricos modernos difieren en que el resultado deba ser placentero o agradable.
La música está compuesta por dos elementos básicos: los sonidos y los «silencios».
El sonido es la sensación percibida por el oído al recibir las variaciones de presión generadas por el movimiento vibratorio de los cuerpos sonoros. Se transmite por el medio que los envuelve, que generalmente es el aire de la atmósfera. La ausencia perceptible de sonido es el silencio, aunque es una sensación relativa, ya que el silencio absoluto no se da en la naturaleza.

El sonido tiene cuatro parámetros fundamentales:
La altura es el resultado de la frecuencia que produce un cuerpo sonoro; es decir, de la cantidad de ciclos de las vibraciones por segundo o de hercios (Hz) que se emiten. De acuerdo con esto se pueden definir los sonidos como "graves" y "agudos". Cuanto mayor sea la frecuencia, más agudo (o alto) será el sonido. La longitud de onda es la distancia medida en la dirección de propagación de la onda, entre dos puntos cuyo estado de movimiento es idéntico; es decir, que alcanzan sus máximos y mínimos en el mismo instante.
La duración corresponde al tiempo que duran las vibraciones que producen un sonido. La duración del sonido está relacionada con el ritmo. La duración viene representada en la onda por los segundos que esta contenga.
La intensidad es la fuerza con la que se produce un sonido; depende de la energía. La intensidad viene representada en una onda por la amplitud.
El timbre es la cualidad que permite distinguir los diferentes instrumentos o voces a pesar de que estén produciendo sonidos con la misma altura, duración e intensidad. Los sonidos que escuchamos son complejos; es decir, son el resultado de un conjunto de sonidos simultáneos (tonos, sobre tonos y armónicos), pero que nosotros percibimos como uno (sonido fundamental). El timbre depende de la cantidad de armónicos o la forma de la onda que tenga un sonido y de la intensidad de cada uno de ellos, a lo cual se lo denomina espectro. El timbre se representa en una onda por el dibujo. Un sonido puro, como la frecuencia fundamental o cada sobre tono, se representa con una onda sinusoidal, mientras que un sonido complejo es la suma de ondas sinodales puras. El espectro es una sucesión de barras verticales repartidas a lo largo de un eje de frecuencia y que representan a cada una de las senoides correspondientes a cada sobre tono, y su altura indica la cantidad que aporta cada una al sonido resultante.

Que se entiende por Bullying

Este tipo de violencia escolar se caracteriza, por tanto, por una reiteración encaminada a conseguir la intimidación de la víctima, implicando un abuso de poder en tanto que es ejercida por un agresor más fuerte (ya sea esta fortaleza real o percibida subjetiva mente) que aquella. El sujeto maltratado queda, así, expuesto física y emocionalmente ante el sujeto maltratador, generándose como consecuencia una serie de secuelas psicológicas (aunque estas no formen parte del diagnóstico); es común que el acosado viva aterrorizado con la idea de asistir a la escuela y que se muestre muy nervioso, triste y solitario en su vida cotidiana. En algunos casos, la dureza de la situación puede acarrear pensamientos sobre el suicidio e incluso su materialización, consecuencias propias del hostigamiento hacia las personas sin límite de edad. Suelen ser más propensos al acoso escolar aquellos niños que poseen diversidad funcional, entre las cuales se pueden contar el síndrome de Down, el autismo, síndrome de Asperger, etc.

El acoso escolar (también conocido como hostigamiento escolar, mato naje escolar, matoneo escolar, maltrato escolar o en inglés bullying) es cualquier forma de maltrato psicológico, verbal o físico producido entre escolares de forma reiterada a lo largo de un tiempo determinado tanto en el aula, como a través de las redes sociales, con el nombre específico de ciber acoso. Estadística mente, el tipo de violencia dominante es el emocional y se da mayoritariamente en el aula y patio de los centros escolares. Los protagonistas de los casos de acoso escolar suelen ser niños y niñas en proceso de entrada en la adolescencia, siendo ligeramente mayor el porcentaje de niñas en el perfil de víctimas.

-Bloqueo social
Agrupa las acciones de acoso escolar que buscan bloquear social mente a la víctima. Todas ellas buscan el aislamiento social y su marginación impuesta por estas conductas de bloqueo. Son ejemplos las prohibiciones de jugar en un grupo, de hablar o comunicar con otros, o de que nadie hable o se relacione con él, pues son indicadores que apuntan un intento por parte de otros de quebrar la red social de apoyos del niño.
Se incluye dentro de este grupo de acciones el meterse con la víctima para hacerle llorar. Esta conducta busca presentar al niño social mente, entre el grupo de iguales, como alguien flojo, indigno, débil, indefenso, estúpido, llorica, etc. El hacer llorar al niño desencadena socialmente en su entorno un fenómeno de estigmatización secundaria conocido como mecanismo de chivo expiatorio. De todas las modalidades de acoso escolar es la más difícil de combatir en la medida que es una actuación muy frecuentemente invisible y que no deja huella. El propio niño no identifica más que el hecho de que nadie le habla o de que nadie quiere estar con él o de que los demás le excluyen sistemáticamente de los juegos.

-Hostigamiento
Agrupa aquellas conductas de acoso escolar que consisten en acciones de hostigamiento y acoso psicológico que manifiestan desprecio, falta de respeto y desconsideración por la dignidad del afectado. El desprecio, el odio, la ridiculización, la burla, el menosprecio, los motes, la crueldad, la manifestación gestual del desprecio, la imitación burlesca son los indicadores de esta escala.

-Manipulación social
Agrupa aquellas conductas de acoso escolar que pretenden distorsionar la imagen social del niño y “envenenar” a otros contra él. Con ellas se trata de presentar una imagen negativa, distorsionada y cargada negativamente sobre la víctima. Se cargan las tintas contra todo cuanto hace o dice la víctima, o contra todo lo que no ha dicho ni ha hecho. No importa lo que haga, todo es utilizado y sirve para inducir el rechazo de otros. A causa de esta manipulación de la imagen social de la víctima acosada, muchos otros niños se suman al grupo de acoso de manera involuntaria, percibiendo que el acosado merece el acoso que recibe, incurriendo en un mecanismo denominado “error básico de atribución”.

-Coacción
Agrupa aquellas conductas de acoso escolar que pretenden que la víctima realice acciones contra su voluntad. Mediante estas conductas quienes acosan al niño pretenden ejercer un dominio y un sometimiento total de su voluntad. El que la víctima haga esas cosas contra su voluntad proporciona a los que fuerzan o tuercen esa voluntad diferentes beneficios, pero sobre todo poder social. Los que acosan son percibidos como poderosos, sobre todo, por los demás que presencian el doblega miento de la víctima. Con frecuencia las coacciones implican que el niño sea víctima de vejaciones, abusos o conductas sexuales no deseadas que debe silenciar por miedo a las represalias sobre sí o sobre sus hermanos.

-Exclusión social
Agrupa las conductas de acoso escolar que buscan excluir de la participación al niño acosado. El “tú no”, es el centro de estas conductas con las que el grupo que acosa segrega social mente al niño. Al ningunear lo, tratarlo como si no existiera, aislarlo, impedir su expresión, impedir su participación en juegos, se produce el vacío social en su entorno.

-Intimidación
Agrupa aquellas conductas de acoso escolar que persiguen amilanar, amedrentar, apocar o consumir emocionalmente al niño mediante una acción intimidatoria. Con ellas quienes acosan buscan inducir el miedo en el niño. Sus indicadores son acciones de intimidación, amenaza, hostigamiento físico intimidatorio, acoso a la salida del centro escolar.

-Amenaza a la integridad
Agrupa las conductas de acoso escolar que buscan amilanar mediante las amenazas contra la integridad física del niño o de su familia, o mediante la extorsión.

Enfoque científico del Egoísmo y el altruismo

El altruismo puede entenderse como altruismo puro, donde no existen apego ni deseo, como en el caso del budismo, o bien como «egoísmo altruista», como en el caso del cristianismo, donde existen apego a un ser superior y el deseo de obtener la salvación. En la práctica, en ambas religiones existen apego y deseo, y en el budismo existe una última etapa previa a la iluminación que consiste en la renunciación a todos los logros conseguidos a cambio de nada, con el objetivo de destruir el ego completamente. Para el llamado «altruismo puro», no existe posibilidad de negociación; las relaciones no son competitivas, sino colaborativas: uno procura el bienestar de los demás sin esperar nada a cambio, y los demás procuran el bienestar de uno.

El budismo sitúa al apego y al deseo como emociones negativas que también producen ira y, en definitiva, sufrimiento. Apego, deseo, ira, miedo e ignorancia (por ejemplo, falta de comprensión del sufrimiento ajeno) contribuyen a reforzar el ego. En la filosofía budista, el amor real es el amor compasivo, y el amor y el ego son incompatibles. Recientes estudios científicos han demostrado que la meditación produce un incremento de la actividad en las zonas cerebrales relacionadas con las emociones positivas y una disminución de la actividad en las zonas relacionadas con la ira y la depresión. El «egoísmo altruista» es la filosofía de las relaciones humanas predicada por Jesucristo («ama a Dios sobre todas las cosas y al prójimo como a ti mismo»). El altruismo es la forma de entender el amor para Leibniz, quien cree que, si uno realmente entiende y busca el amor, siempre obtendrá placer en la felicidad de otro.

Richard Dawkins interpreta ambas actitudes como las expresiones del instinto de conservación del individuo (egoísmo) y de la especie (altruismo). Explica que, según una teoría aceptada por algunos biólogos, heredamos los genes responsables de tales actitudes de especies antecesoras, y que, antes de nuestra llegada, la evolución biológica estuvo probablemente controlada por un mecanismo denominado «selección de grupos»; en virtud de este mecanismo, los grupos de individuos en los que hubiese más miembros dispuestos a sacrificar su vida por el resto tendrían mayor probabilidad de sobrevivir que los que estaban compuestos por individuos egoístas; esto daría como resultado que el mundo terminase poblado por individuos altruistas. Es una teoría que, aunque proporciona una explicación para el hecho de que actualmente el altruismo predomine en el mundo, genera gran controversia en el mundo científico por contradecir directamente la teoría darwinista; por ello, la explicación personal del autor acerca de la supervivencia del altruismo en el marco darwinista del egoísmo individual es que la unidad de supervivencia no es el individuo, sino el gen; es decir, bajo este punto de vista, los seres humanos y los grupos de seres humanos somos «máquinas de supervivencia» «creadas» por los genes en su propio beneficio.

En cualquier caso, argumenta Dawkins, por el hecho de ser la primera especie racional, también somos la primera especie en la historia de la evolución capaz de elegir entre ambos tipos de comportamiento de forma voluntaria, actuando por lo tanto de forma «independiente» a nuestra propia programación genética. La evolución parece producirse mediante procesos solapados entre sí y progresivamente refinados. A un nivel inmediato, funciona mediante un simple, gigantesco e irracional proceso de ensayo y error; los éxitos de determinado estado de organización facilitan su continuación. No obstante, a medida que la organización se va desarrollando cada vez más, aparecen de forma espontánea métodos de predicción estratégica, que eligen caminos indirectos que, a corto plazo, incluso pueden parecer un error, pero que, considerados en conjunto, constituyen un acierto; este tipo de «conductas» han podido observarse en modelos virtuales de evolución programados en una computadora; la conducta agresiva y egoísta constituye un primer nivel de supe organización, en virtud de la cual el individuo «comprende» que para su supervivencia debe «atacar» a sus rivales antes de acudir directamente a la recompensa, y la conducta altruista es un segundo nivel que surge en el momento en que los individuos desarrollan la capacidad de comunicarse entre sí; en modelos computacionales se ha observado el desarrollo completamente espontáneo de combinaciones de ambos mecanismos, de tal modo que un individuo se comunica con otros varios y «miente» al resto en beneficio del grupo. El egoísmo, de este modo, aparece desde la perspectiva del grupo como un comportamiento táctico, y el altruismo como un comportamiento estratégico.

La inteligencia se constituye como un nivel adicional de supe organización que permite el análisis de la situación global y la predicción del mejor camino a seguir mediante la sustitución en buena medida del método físico del ensayo y error por un proceso paralelo y «virtual», también sujeto a evolución, que se desarrolla íntegramente en el cerebro de los individuos y que se transmite de forma igualmente «virtual» a las generaciones siguientes mediante la educación. Según la teoría de la singularidad tecnológica en conjunción con el concepto de Transhumanismo, se sugiere que pronto tendremos la posibilidad de programar de forma «artificial» nuestra propia evolución de la forma más beneficiosa para todos, aunque, no obstante, existen críticas al respecto.

¿QUE ES EL AMOR?

El amor es un concepto universal relativo a la afinidad entre seres, definido de diversas formas según las diferentes ideologías y puntos de vista (artístico, científico, filosófico, religioso). De manera habitual, y fundamentalmente en Occidente, se interpreta como un sentimiento relacionado con el afecto y el apego, y resultante y productor de una serie de actitudes, emociones y experiencias. En el contexto filosófico, el amor es una virtud que representa todo el afecto, la bondad y la compasión del ser humano. También puede describirse como acciones dirigidas hacia otros y basadas en la compasión, o bien como acciones dirigidas hacia otros (o hacia uno mismo) y basadas en el afecto.
En español, la palabra amor (del latín, amor, -ōris) abarca una gran cantidad de sentimientos diferentes, desde el deseo pasional y de intimidad del amor romántico hasta la proximidad emocional asexual del amor familiar y el amor platónico, y hasta la profunda devoción o unidad del amor religioso. En este último terreno, trasciende del sentimiento y pasa a considerarse la manifestación de un estado del alma o de la mente, identificada en algunas religiones con Dios mismo o con la fuerza que mantiene unido el universo. Las emociones asociadas al amor pueden ser extremadamente poderosas, llegando con frecuencia a ser irresistibles. El amor en sus diversas formas actúa como importante facilitador de las relaciones interpersonales y, debido a su importancia psicológica central, es uno de los temas más frecuentes en las artes creativas (cine, literatura, música).

Desde el punto de vista de la ciencia, lo que conocemos como amor parece ser un estado evolucionado del primitivo instinto de supervivencia, que mantenía a los seres humanos unidos y heroicos ante las amenazas y facilitaba la continuación de la especie mediante la reproducción. La diversidad de usos y significados y la complejidad de los sentimientos que abarca hacen que el amor sea especialmente difícil de definir de un modo consistente, aunque, básicamente, el amor es interpretado de dos formas: bajo una concepción altruista, basada en la compasión y la colaboración, y bajo otra egoísta, basada en el interés individual y la rivalidad. El egoísmo suele estar relacionado con el cuerpo y el mundo material; el altruismo, con el alma y el mundo espiritual. Ambos son, según la ciencia actual, expresiones de procesos cerebrales que la evolución proporcionó al ser humano; la idea del alma, o de algo parecido al alma, probablemente apareció hace entre un millón y varios cientos de miles de años.

Dos formas de entender el amor


Los seres humanos podemos desarrollar en esencia dos tipos de actitudes: bajo una de ellas somos altruistas y colaboradores, y bajo la otra somos egoístas y competidores. Existen personas totalmente polarizadas hacia una de las dos actitudes por voluntad propia; por ejemplo, los monjes budistas están totalmente volcados hacia el altruismo, y los practicantes del objetivismo, hacia el egoísmo. Y también existen personas que combinan ambas formas de ser, comportándose, unas veces, de forma altruista y colaboradora, otras, de forma egoísta y competitiva, y otras, de forma parcialmente altruista y competitiva. En algunas partes del mundo predomina el altruismo (Tíbet), de modo que el egoísmo se ve en general como algo negativo. Y existen grupos humanos donde sucede lo contrario. Todas las guerras de la historia nacieron del egoísmo por parte de, al menos, uno de los dos bandos; todas las situaciones conflictivas del ser humano proceden del egoísmo.

10 tips de seducción para revivir el Amor

Si crees que estas pasando una crisis con tu pareja pon en practica los siguientes 10 tips para revivir esa pasión:

*Consejo 1: Sentirse bien consigo mismo, ya que da seguridad. Las personas más seguras destilan mayor erotismo y sensualidad, por eso ¡ama tu cuerpo, conócete y disfrútalo!

*Consejo 2: Un beso apasionado puede ser el principio de una larga y placentera noche. Para todas las personas, tanto hombres como mujeres, es imprescindible un buen beso para iniciar una candente relación sexual. Así que visita el arte de besar y acompaña a tus besos con caricias en la espalda, el cuello y el cabello.

*Consejo 3: La forma de comportarse frente a tu pareja es un gran detonante. Cuando la seduzcas, muéstrate amable y servicial, empieza diciéndole palabras lindas sobre lo que sientes o lo que te atrae de él o ella, y conforme pase el tiempo susurrarle algo más atrevido y pícaro. Toma este consejo de seducción muy en serio, de seguro que te ahorrará camino.

*Consejo 4: Para ese encuentro tan ansiado, vístete con colores que, sin lugar a dudas llamen su atención y proyecten tus intenciones. Por ejemplo, el rojo invita al acercamiento, además de mostrar una personalidad extrovertida... lo que tiene un efecto directo sobre la libido. El negro da un aire de misterio, el rosa por su lado indica romanticismo.

*Consejo 5: ¡Sorprenderle! Una llamada insinuadora a cualquier hora, una caricia atrevida en el momento menos esperado, que lo o la esperes de forma muy sensual en la cama iluminada por velas, sin que él o ella lo sepa, son verdaderas sorpresitas que terminaran por sorprenderte. Prueba algunos de estos consejos de seducción, y te auguramos un exquisito éxito.

*Consejo 6: La cena es un momento ideal para conseguir la atención de tu pareja, y si tú eres quien cocina, mucho mejor. No dudes en utilizar alimentos afrodisíacos, un buen vino y la sugerente presentación son de lo más importante; que ésta sea sexy y romántica y él o ella noten que te esforzaste preparándola.

*Consejo 7: ¡Seamos creativos! Nada mejor para excitar a nuestra pareja que proponiéndole cosas nuevas. Dile lo mucho que deseas practicar una posición sexual específica, lleva algún juguete a la cama, o háganlo en el mismo lugar donde los desate la pasión (la misma mesa luego de cenar, por ejemplo).

*Consejo 8: Deja que el ambiente te ayude. Para seducir a tu chico o chica, crea uno especialmente atractivo para la ocasión. Utiliza una luz tenue, olores y música suave, y acomodar los cojines o almohadones de manera que se vean sensuales, entre otras cosas; usa la imaginación, pero procura no olvidar unas copas de vino.

*Consejo 9: En el encuentro sexual recorre las zonas erógenas de tu pareja, dejando que note lo mucho que la deseas, recuerda que no sólo necesitas las manos, también cuentas con la lengua, labios, cabello. Y de nuevo haciendo referencia a la piel, si es convenientemente explorada, se pueden descubrir vastas regiones de exquisitas sensaciones quizá no reconocidas antes.


*Consejo 10: Realicen juegos sexuales, masajes en pareja o cumple alguna de las fantasías eróticas de tu pareja.


¡SUERTE!